El
embarazo es una oportunidad ideal para incorporar hábitos alimentarios saludables que te permitirán mantenerte sana y cuidar a tu bebé.
En una mujer que inicia su
embarazo con un estado nutricional normal, la ingesta energética permanece relativamente constante durante el primer trimestre, en el segundo trimestre se debe aumentar 300 kcal aproximadamente y 475 kcal en el tercero. Esto implica agregar una fruta más un pancito tipo porteño a partir del segundo trimestre, y una taza de leche a partir del último trimestre. Por lo tanto, la creencia popular de que la embarazada debe “comer por dos”, puede dar como resultado un incremento excesivo de peso.
Por el contrario, el
embarazo no es un período para realizar planes con restricciones calóricas, aún si iniciaste la gestación con sobrepeso u obesidad, porque esta práctica puede implicar riesgos tanto para ti como para tu hijo.
Algunas recomendaciones para que pongas en práctica…
*Evitar pasar largos períodos de tiempo sin comer, por lo que es importante realizar desayuno, almuerzo, merienda y cena, pudiendo agregar alguna comida entre hora
*Es fundamental comenzar el día con un desayuno que incluya lácteos, pan y fruta.
*Durante el embarazo consumir tres porciones de lácteos por día: leche, yogur y/o quesos.
*Incluir cinco porciones al día de frutas y verduras.
*Seleccionar aquellas de estación y de distintos colores para asegurar un consumo lo más variado posible de nutriente
*Para cubrir el aporte de hierro es fundamental incluir:
- Una porción de carne al día, variando entre carne vacuna, pollo y pescado.
- Leguminosas como lentejas, porotos, garbanzos, habas, al menos dos veces por semana.
- Vegetales de color verde oscuro: acelga, espinaca, chaucha, brócoli.
Los requerimientos de hierro y ácido fólico son tan elevados durante el embarazo que no es posible
cubrirlos únicamente con los alimentos. Por este motivo el Ministerio de Salud Pública recomienda la suplementación con hierro y ácido fólico a todas las embarazadas desde su primer control y los seis primeros meses de lactancia, como mínimo.
*Seleccionar pescado al menos 2 veces por semana,intentando que al menos una vez sea pescado graso tales como atún, sardina, palometa, salmón o arenque.
*Agregar dos cucharadas de aceite al día en crudo a las preparaciones una vez prontas para el consumo.
*Ingerir abundante líquido durante todo el día.
¡El agua potable es lo mejor!
*Es recomendable utilizar condimentos que realcen el sabor natural de los alimentos y evitar llevar el salero
a la mesa y todos aquellos alimentos que contengan sal en su composición.
*No tomar más de 2 tazas de café, 4 tazas de té o 6 vasos de bebidas cola, debido al alto contenido de
cafeína la cual puede perjudicar a tu bebé.
*Esta totalmente contraindicado el consumo de alcohol, tabaco y drogas.
*Para evitar las enfermedades transmitidas por los alimentos, cuidar la higiene de los alimentos desde la compra hasta su consumo.
Las porciones a consumir de cada grupo de alimentos varían entre las embarazadas, es el Licenciado en
Nutrición, el profesional capacitado para indicarte que porciones te corresponden.
Nutricionista: Valentina Baccino
Equipo Padres